sábado, 6 de enero de 2018

SAN SILVESTRE CINTRUÉNIGO 2017

Tras el éxito de la maratón de Lisboa, en octubre, vinieron días de descanso programado y, lo que no quiere ningún deportista, el descanso forzado. Desde principios de noviembre empecé a notar molestias en la cadera derecha que me impedían entrenar. Decidí parar, centrarme en estirar, potenciar, trabajar la técnica de carrera y ver la calle desde la ventana de mi casa. Pasan los días y cuando estás parado, es cuando de verdad te das cuenta lo que necesitas entrenar. Tu cuerpo y tu cabeza no funcionan igual.

A mediados de diciembre, tras 25 días parado, comienzo a trotar. Noto alguna molestia, pero inesperadamente me impresiona que el ritmo no lo he perdido. Si sufro la falta de kilómetros, pero mis piernas recordaban los ritmos de los meses anteriores. 
Sin tener nada planificado, decido correr la San Silvestre de Cintruénigo, que siempre me da suerte para empezar bien el año.

La carrera tenía un recorrido de 5.75 kms, dándole 4 vueltas al circuito establecido. La estrategia clara… Cabeza y confianza. Inicialmente, había decidido colocarme discretamente en el medio del pelotón y luego a ver donde llegaba, pero minutos antes decidí hacer un cambio… Saludos previos a amigos y vamos a la línea de salida. Nuevamente con el dorsal en el pecho, volviendo a sentir la emoción de una carrera.

3,2,1.. A volar, como siempre. Los chavales salen fuertes, cada año me sorprende. A los 200 metros me coloco primero y decido cambiar la estrategia. A romper la carrera, y los que aguanten nos lo jugamos al final. Primer kilómetro a 3:30, buena criba, nos quedamos cinco en cabeza. Damos la primera vuelta, me concentro en las respiraciones de mis compañeros para ir testando comparativamente con las mías, a quien el ácido láctico iría eliminando del grupo. 


Segundo kilómetro en 3:38. Se ha bajado el ritmo, un componente del grupo se queda. Decido cambiar de estrategia, me coloco a final del grupo y observo cómo van tirando los jóvenes. Por dentro, voy vislumbrando cada vuelta. Eso es lo bueno de la experiencia, que cada vez lees mejor las carreras. Tercer kilómetro, nuevamente 3:38.

Empezamos tercera vuelta, uno de los componentes rompe definitivamente la carrera. El mismo, que hace 3 años me ganó en esta carrera. Se va fácil. Salgo detrás, y me mantengo a 100 metros. Nadie me sigue. Pasamos el kilómetro 4 a 3:37. 


Vamos a llegar a la última vuelta, no me acerco al primero, y nadie se me acerca. Es decir, estoy en tierra de nadie. Toca disfrutar, pensar en el tiempo parado y gozar de poder correr sin dolor. Kilómetro 5 lo paso en 3:41, decido apretar los últimos 750 metros a ver sobre todo, que sensaciones tengo. Consigo hacerlos a ritmo de 3:22. Ritmo medio global de 3:35 min/km.  

Entro segundo. Muy contento. El cuerpo vuelve a responder.



Empezamos la temporada….

No hay comentarios:

Publicar un comentario