Por
fin el día 2 de Abril llegó. Esperaba enfrentarme a la Maratón. La última vez
que lo hice, un flato inesperado me sacó de la carrera en el km 32. Este
año, la preparación había sido distinta. Ha consistido en menos kilometros,
más calidad, más técnica y control de ritmos base y sobretodo, más tranquilidad.
Los meses previos he hecho 250 kms, 265 kms y 290 kms, muy lejos de los tiempos
en que si no pasaba de 300 kms al mes , no había sido un buen mes.
Aparte
de los cambios en los entrenamientos, algo en mí ha cambiado. No disfrutaba
corriendo una maratón desde 2015, en París. Presión interna, las ganas de
demostrarme lo que valgo, que si tienes que bajar de 3 horas, en fin, todas
esas rumiaciones que nos lastran y que no nos dejan disfrutar de lo que
hacemos.
Decidí,
esto no lo sabía nadie, que si en esta maratón no hacía las cosas bien y no
disfrutaba, definitivamente, me daría por vencido y me bajaría del cuadrilátero
de la maratón.
Además,
este año, junto con el cambio de fecha, de septiembre a abril, la organización
tuvo a bien cambiar el recorrido.
El
sábado último entreno suave, coger los dorsales y a descansar para el día de la
batalla.
OBJETIVO:
Disfrutar. ¿Cómo? Saliendo a ritmos fijos de 4:10-4:12 min/km, no hacer cambio
y marcar manualmente los kilómetros en el gps.
SALIDA:
Cómo siempre, la salida será a fuego. Lo comento con un amigo antes de salir,
salida de 10000 toca jaja.
10,
9, 8, saltito, 7, 6, miro al cielo rogando que el Cierzo retrase su aparición,
5, 4, pienso “corre egoísta Nacho”, 3, 2, a disfrutar, 1 … Vamosss!!!
Salimos
con ánimos renovados , giro a la izquierda, tomamos Echegaray y Caballero y
ponemos rumbo a la Almozara (primer y acertado cambio en el recorrido). La
gente me va pasando el gps marca 4:10, me siento tranquilo. Van pasando
primeros kilómetros donde la gente se recoloca, yo marco kilómetro a kilómetro.
La liebre de 3:00, y el grupo, me llevan unos 200 metros. Voy muy cómodo. Mi amigo Carlos, por la zona de la Expo, me anima (qué grande eres) y me tranquiliza sobre el ritmo que llevo.
Primeros 5 kilómetros ritmo medio 4:09-4:11. Se pega un corredor y me insta a
ir al grupo de tres horas, le contesto, que yo voy a ritmo y que creo que ha
salido muy rápido la liebre. En el kilómetro 10, recojo a algún integrante del
grupo de 3 horas. Le digo que se una y que vayamos a ritmo. Bastante
contrariado con la liebre, que le ha sacado de punto, decide hacer la guerra
por su cuenta. Yo mientras tanto acercándome al grupo, y entretenido marcando
los laps km a km. Mi mente no va pensando en kilómetros si no en mantener el
ritmo del parcial. Tomo el gel en el 15 y en el km 16 aproximadamente cojo al
grupo de 3 horas. Qué molesto voy en grupo, lo bueno que coincide con los
kilómetros más duros y viene bien ir acompañado. El Cierzo hace aparición, así
que los kilómetros finales van a ser duros.
Vamos en grupo, los
avituallamientos se complican.
Paso la media un poco por delante del grupo, en
1:29:48 (tiempo neto). En otras maratones hubiera pensado, ya verás te vas a
comer el tiempo… hoy no, voy DISFRUTANDO y hasta donde pueda.
Del kilómetro 22
al 28 (gel en el 25), gracias a que el recorrido lo favorece hago mis mejores
parciales, incluso marco un 3:49 y un 3:55… sigo en el grupo que poco a poco va mermando.
Llegamos a la verdad, kilómetro 30. En ese kilómetro, otro que no podía faltar, mi amigo Adrián. Nunca falla y su célebre frase "vamos cojones" me insufla fuerza extra.
Yo, erre que erre, dándole al botoncito cada kilómetro y marcando 4:09. Lo único que pienso, como no llevaba ninguna chuleta con proyecciones, era, que cómo marcando 4:09-4:10 el kilómetro, podía ir con el grupo de 3 horas. No me cuadraba. Pero a lo mío, se me estaba pasando la maratón volada. Llegamos al kilómetro 32 aproximadamente, empezamos la subida que nos va a llevar al puente de Giménez Abad. Al final de él, el km 35.
Yo, erre que erre, dándole al botoncito cada kilómetro y marcando 4:09. Lo único que pienso, como no llevaba ninguna chuleta con proyecciones, era, que cómo marcando 4:09-4:10 el kilómetro, podía ir con el grupo de 3 horas. No me cuadraba. Pero a lo mío, se me estaba pasando la maratón volada. Llegamos al kilómetro 32 aproximadamente, empezamos la subida que nos va a llevar al puente de Giménez Abad. Al final de él, el km 35.
Empiezo a sufrir en el 33, el grupo se va, oigo que dice la liebre, que
llegamos en 2:57. Me da esperanzas. Primera vez que voy sufriendo, pero los
parciales van saliendo , alguno me despisto y sale a 4:22. Llegamos al 35, sólo
quedan 7. Me tomo el último gel y vamos. Vamos, que la leche que nos da el
Cierzo de cara es antológica, que rachas. Pues nada, a bajar cabeza y a no
perder mucho tiempo.
Del 35 al 40 pienso que se me va a ir. Algún parcial lo
controlo, pero alguno me voy a 4:40. Pienso, Nacho como no bajes por 5-10
segundos te coronas. Llego al 40, por debajo de 2:50, y entonces sí me lo creo.
Me quedaba la subida de San Vicente de Paúl, Coso y ya tirarme hasta la meta.
Me hidrato en la subida y de repente un compañero me adelanta y me dice “vamos
chaval, pégate y entramos en sub 3”, no sé que fue, ni dónde saqué fuerzas, pero
subí como un tiro, llegué al Coso y sólo quedaba bajar hasta el Pilar.
Giro a
derechas, calle Don Jaime, vamos Nacho que lo tienes, recta en bajada, curva peligrosa a
izquierda, Calle empedrada de Espoz y Mina, sigo empujando, giro a derecha,
calle Alfonso, la gente anima sin parar.
Quedan segundos. Giro a derecha,
recta, giro a izquierda y recta corta con arco de meta al final. Veo el tiempo
al principio de la recta 2:59:30, y entonces, vivo algo que había soñado mil
veces. El sabor de la victoria. Esprinto, alzo los brazos y al pasar por meta
GRITO. En ese grito plasmé todos los sinsabores, todos los kilómetros, el frío
pasado en invierno , el calor del verano, la incomprensión, la pena, el
llanto.. TODO.
Cruzo
la meta. Me flexiono y disfruto. Me cuelgan la medalla y al fondo, mi amigo
Juan Romero (Aprende a Correr) me mira. Me acerco, me pregunta , asiento, y nos
fundimos en un fuerte abrazo que sólo dos guerreros saben lo que significa. Él,
marcón de 2:47, pero sé que casi se alegra más por mi sub 3.
Al
final, 2:59:36… Segunda media en 1:29:48, es decir, he doblado en una maratón.
Los
sentimientos de estos días los guardo para mí y para los míos, que siempre han
estado allí.
Enlace vídeo de la llegada
http://www.corriendovoy.com/atletismo/195781/maraton-zaragoza-2017
Enlace del move
http://www.movescount.com/es/moves/move149805280
Maravilloso, cuanto me alegro, te lo mereces mas que nadie, eres un gran campeon!
ResponderEliminarMuchísimas gracias! Era mi día. Un fuerte aperta
EliminarIncreíble relato, si alguien en este mundillo se merecía esa marca, ese eres tú. Feliz...Muy feliz por tu logro. Un abrazo!
ResponderEliminarSé amigo lo que habéis sufrido conmigo, me acordé de todos vosotros cuando lo conseguí.Un fuerte abrazo y lo celebraremos
EliminarMe ha encantado leerte Nacho. Me empieza a picar el maratón, y en parte, gracias a ti. He pensado en Donosti 2018....
ResponderEliminarGracias! Siempre digo lo mismo, cuando estés pelado de medias es el momento, si te llama, ir a la batalla. Una buena programación, un objetivo real y sobre todo, disfrutar de los entrenamientos. Si lo haces así, te atrapará para siempre...
EliminarGrandísimo Nacho! No pudo contigo ni el Cierzo! No me puedo creer que se te pasara por la cabeza seriamente "bajarte del cuadrilátero de la maratón", es muy duro pero ahí está la majestuosidad de esta prueba y está demostrado de sobra que vales para ello. A todos nos toca sufrir y quizás por eso nos gusta tanto correr una maratón de vez en cuando :D
ResponderEliminarEnhorabuena de nuevo y la siguiente ... esa sí que es de las grandes!! A por ello!
Un abrazo!
Muchísimas gracias! Ya era hora y ya me tocaba. Me he vuelto a reenganchar a la maratón. Suerte tú con la tuya, un abrazo fuerte
Eliminar